
Publicado: 9 de Noviembre de 2015
En todas las etapas de la vida es importante mantener una buena salud oral, sin embargo, èsta se vuelve elemental durante el embarazo.
Estudios revelan que un alto porcentaje de la población femenina no se realiza un control de la salud dental cuando se espera un bebé, aunque un porcentaje aún más alto admite sufrir problemas de salud bucal durante la gestación, como caries, dolor en alguna pieza dentaria o el sangrado de encías (gingivitis). Todas estas alteraciones suponen un riesgo latente para el bebé.
Los cambios hormonales que ocurren en el embarazo favorecen la aparición de gingivitis.
La gingivitis es una inflamación y enrojecimiento de las encías que puede provocar dolor generalizado de la boca y una mayor tendencia al sangrado. Los problemas de las encías aparecen a menudo durante el segundo mes del embarazo, suelen ser máximos en el octavo mes y mejoran tras el parto. Si antes del embarazo ya tenías problemas gingivales o enfermedad periodontal probablemente se agraven.
embarazo no es una enfermedad por lo que la La.mujer embarazada puede recibir el tratamiento dental que precise. Durante el primer trimestre se suelen realizan sólo tratamientos de urgencia, ya que es durante el primer trimestre cuando se van a formar las estructuras principales, tales como el Sistema Nervioso Central con el cerebro, el corazón y el Sistema Vascular, etc…
El segundo trimestre suele ser el momento ideal para realizar cualquier tratamiento dental, no existiendo ningún problema en utilizar anestesia local para asegurar la analgesia durante el tratamiento. El odontólogo usará fármacos anestésicos que no afectaran a tu bebé.
El exámen radiográfico es un importante instrumento diagnóstico y de seguimiento de algunos tratamientos dentales. El haz de rayos radiográficos no va dirigido hacia el abdomen y la cantidad de radiación que se produce es pequeña, por lo que podrán realizarse radiografías dentales durante el embarazo siempre y cuando se ponga un delantal de plomo que cubra el abdómen de la embarazada y proteja al bebé.
En el último trimestre del embarazo puede resultar molesto el permanecer sentada en el sillón dental durante un período prolongado de tiempo y es por ello que se procura evitar la realización de tratamientos largos, aunque no existe inconveniente en practicar tratamientos dentales. El dentista se ocupará de que el abdómen no dificulte el retorno venoso de tus piernas.
No está indicado realizarse blanqueamientos dentales ya k pueden llevar a aumentar la erosión dental que ya de por si, a veces, se produce, como consecuencia de las nauseas y vótimos y el PH más ácido de la saliva que suelen presentarse en este periodo.
En resumen, durante el embarazo hay que mantener una dieta saludable evitando dulces, no fumar ni beber alcohol, mantener una correcta higiene dental y visitar, al menos una vez, a tu dentista de confianza.